El tiempo, es algo muy valioso, algo que contamos desde un principio y que nos marca con cada paso que damos en nuestra pequeña vida. De nuestro pasado aprendemos cosas que nos hacen enfrentar el presente, sin embargo, no tiene sentido enfrentar un presente si no tienes nada en tu mente que recuerde tu pasado, si no recuerdas nada, si no eres nadie en un lugar lleno de personas que se mueven a tu alrededor con un objetivo...y si no recuerdas ni tan siquiera quien eres tú. Vacío... un vacío fue lo que sentí, al abrir los ojos ése día y no saber nada... ni siquiera, quien era yo. Y solo percibí la necesidad de descubrir dos cosas. ¿Qué me pasó? Y la más importante... ¿Quién soy ahora?.