en un lugar cercano al mar un viejo restaurante donde creció una joven con grandes sueños un la joven descansa en aquel sillón después de un duro día esta tratando de poder dormir agotada cae en los brasos de morfeo tal como deseaba un sueño persistente regresa ella corriendo alo largo de un callegon sin salida perseguida por un rostro que no puede descubrir despierta pruscamente sin poder encontrar paz en su respiracion agotada en su rostro recorre unas gotas de sudor. tn desperto coriendo buscar algo de vever ese sueño un triste desafortunado encontrara el dueño de el ese rostro tan frecuente que no puede ser cambiado