- Jamás te lo perdonare - susurró cerca de mi oído- Créeme no voy a sentir nada con esto. -Qué...- empecé pero Benjamin posó sus labios en los míos. Abrí los ojos como platos al percatarme de lo que él tonto estaba haciendo. Miré a todo él mundo y vi que aplaudían de alegría. Yo sólo cerré los ojos lentamente mientras las lágrimas corrían en silencio por mi mejillas.
4 parts