-¿Estas seguro de arriesgar todo por él? -Vendería mi alma por él, no sabes lo enamorado que estoy, si estuvieras en mi lugar harías lo mismo. Esas simples palabras que Peter le dijo Gwen serían su sentencia de muerte. Si tal solo alguien le hubiera advertido el peligro que es amar ciegamente, en donde podría caer en un abismo