Para Renata, él es un policía entregado y con misterio. Para Raúl, ella es una sofisticada criminal.
Para ella, no tener recuerdos le es indiferente. Para él, los recuerdos son algo que duele.
A ella, su pasado le da miedo. A él, su pasado le atormenta.
Para ella, el mundo es una guerra, que debe pelear día tras día. Para él, el mundo es una pesadilla, de la cual quiere despertar.
A ella le robaron la inocencia, pero a él, le han arrebatado a quién más quiere.
Ella ha perdido su libertad y, vive llena de sueños rotos. Él ha extraviado al amor y, vive atado al remordimiento.
Los dos ignoran que el crimen los separó y ahora es quien los une de nuevo. Los dos buscan a la misma persona. Él, porque es su sospechoso. Ella, porque es su amado.
Él nunca ha dejado de buscarla y ella no ha dejado de esperarlo.
Tras la muerte de sus padres, Evie debe dejar su vida como pogue atrás. Ahora, su tutela pertenecerá a su tía materna, lo que la llevará a vivir en Figure Eight y por tanto alejarse de sus amigos. Sin embargo, ahora otra clase de personas aparecerán en su vida.