El reloj sonó más fuerte que nunca, el sólo se quedó paralizado en su cama, mientras el recuerdo de aquella sonrisa se transformaba en una mueca llena de odio. Por su ventana entro el infernal calor de verano, empeorando su desgracia. Su boca ardía con fuego propio, así como el resto de su cuerpo. Por que tenía ese deseo de posesión en mente...¿si ambos eran alfas? Así como muchas otras preguntas, esa no tuvo repuesta. Au. Omegaverse