Soy lo que las personas odian a plena vista: soy un vago, alcohólico, drogadicto, hipócrita, mentiroso, odioso, arrogante y más zorra que tu tía la solterona, en resumen soy un desperdicio para la sociedad. No los culpo por odiarme, antes me daba tanto miedo ser odiado pero ahora lo encuentro excitante, por eso me encanta seguir mintiendo, robando y peleando, todo para conseguir una reacción negativa para mí, así es, soy una zorra-busca-atención. Me gusta tanto la atención, me excita tener sus ojos perforándome, por ello llegué a altos extremos... Tales como llegar a matar a una persona.
Importante:
*Inspirada PARCIALMENTE en mi canción favorita "Everybody gets high" de Missio
Samantha Rivera y María Victoria Arellano.
No tenían muchas cosas en común, sus edades eran distintas, sus maneras de caminar no coincidían y mucho menos la estatura. Nunca pensaban igual, tenían ideas muy diferentes y actitudes contrarias. María Victoria era dueña de si misma, Samantha era una chica insegura. Sus manos parecían ser hechas como piezas exactas para encajar una con otra, con los dedos entrelazados y mirando a la misma dirección.
Samantha era su pequeña.
Está historia no me pertenece, todos los derechos a su autor original.