Thunder

Daniel Cuzis es el típico estereotipo del chico malo. Se emborracha hasta perder la conciencia, fuma como si quisiera morir a los treinta y carga una navaja en el bolsillo.

Pero en todo cliché está el mismo dilema, ¿Por qué es un chico malo?

Daniel creció en la pobreza, con los gritos de sus padres y el llanto de su madre. Él solo conoce la miseria y la desesperación.

Y solo hay algo que hace que no se vuelva loco: salir a cazar delincuentes.

Daniel no es ningún justiciero. No los lleva a la policía, ni les enseña una lección, ni los golpea solo hasta que se arrepienta de lo que hicieron.

Él caza delincuentes porque su madre camina por el mismo barrio y algún día alguno de ellos podría herirla a ella.

A veces vuelve lleno de heridas, otras veces cortes. Una vez logró incluso que una bala le dé justo en el hombro.

Pero no le importaba, después de todo ninguno le había ganado, ¿Quién puede vencer a un chico de 17 años con la fuerza de mil hombres?