Nina es una joven ladrona de dieciséis años que perdió a sus padres en un incendio cuando ella apenas tenía seis años. Movida por el odio, al estar convencida de que aquel incendio no fue una casualidad sino un atentado contra su familia por envidia de todo lo que poseían, empezó a robar para quitarle a la gente sus pertenencias más queridas, igual que a ella le quitaron lo que más quería. Con el tiempo y gracias a un extraño chico comprenderá que los bienes materiales no son lo que la gente más aprecia.