Luego de que a consecuencia de la gran devastación, la humanidad experimentara cambios significativos como la reducción de su taza de mortalidad a menos de la mitad, experiencias como el amor y la felicidad fueron consideradas banales y sin propósito. Muchos años después en una humanidad fría y sin sentimientos, han sido creados los droives, drones humanoides entrenados con el único propósito de amar y de hacer experimentar a sus personas el recuerdo del amor, parecen una gran promesa pese a la opinión popular. Después de todo, ¿qué puede salir mal si somos guiados por el amor?