¿Qué tantas palabras guardamos en nuestro corazón para decirle a esa persona que sabemos, por más que duela, el sentimiento no es recíproco? "El día en que decidas mirarme a los ojos" deja al fín libres entre distintos puntos de vista esos pensamientos encerrados por mucho tiempo dentro de nuestra mente como en nuestro corazón, esos que pasaron de ser suaves y sinceros a convertirse en una flor marchita, una semilla amarga plantada en nuestro interior o hasta a veces, eso que no nos animamos a decir.