Para Bea su vida no ha sido perfecta, pero tampoco terrible, pasó de conocer solo la inocencia a conocer la crueldad y de confiar en todos a aprender a desconfiar de todos.
Bea no se acepta, pero vive con ello.
Bea es soñadora, pero sabe que hay que ver la realidad.
Bea ama el arte, en todas sus disciplinas.
Adrien es terrible, pero buena persona, aunque trate de ocultarlo y esté lejos de ser inocente. Ama y vive para el baile y aprendió de la mejor, su mamá.
Adrien tiene un grupo de baile y los quiere como su propia familia.
Adrien sabe que es atractivo y no lo desaprovecha.
Adrien lucha contra su padre para seguir haciendo lo que le gusta.
Bea ha aterrizado en Barcelona para comenzar una nueva vida.
Adrien ha vuelto a Barcelona.
Son dos seres completamente diferentes, que bastará solo una noche para dar rienda a que todo cambie por completo.
Bea enseñará a Adrien que se puede encontrar arte en las pequeñas cosas.
Adrien enseñará a Bea que nunca viene mal un poco de descontrol.
Elliot Jensen and Elliot Fintry have a lot in common. They share the same name, the same house, the same school, oh and they hate each other but, as they will quickly learn, there is a fine line between love and hate.