La vida podía cambiar en un simple segundo. Eso lo sabía perfectamente Levi Ackerman. Un día era un mercenario de la ciudad baja haciendo golpes junto con Isabel y Farlan para ganarse la vida, y al siguiente estaba a punto de convertirse en un juguete para unos cerdos con tal de salvar a la persona que había eligido seguir como si fuera un dios. Si la vida daba muchas vueltas tantas que lo dejaban sin aliento. Aunque no se metió en ello por simple gusto, las vueltas en sí vida tenían un culpable. Erwin Smith. Advertencia: ✔︎Lengua fuerte ✔︎Abuso ✔︎Violencia ✔︎ Descripción explícita Los personajes y el mundo pertenecen a Hajime Isayama, todos los créditos.