Soy su mejor amiga, pero lo amo, sí, puede que sea el típico chico que suele intimidar con solo una mirada, el típico chico deseado por muchas y quizás con muchos enemigos, pero a él le debo prácticamente mí vida, lo conozco desde siempre, lo conozco muy bien... O eso pensaba. Amarlo es aceptarlo, pero ¿Podré aceptar lo que es en realidad Alexander Watson? ¿Podré aceptar su verdadera vida? ¿Su pasado? ¿Lo que hace? No lo creo.