- ¿Cuánto tiempo sin vernos niña globo? - Al oír esa espantosa voz, que por años me traumatizo enfundada en un tono más grueso y sensual me gire para verlo. - ¿¡Que rayos haces tú aquí!? - Grite entrando en pánico, sin embargo este se acercó a mi como si nada he inclino su espalda para acercar su rostro al mío. Trague en seco. - Pues, como veras...- Suspiro y un brillo malicioso cruzó sus ojos azules- Seremos compañeros otra vez Anastasia...- Arrastro cada letra de mi nombre, como si la saboreara con la punta de la lengua y sonrió provocándome escalofríos.