Hola soy Valentina Duarte, y nunca pensé que me enamoraría del hijo de mi madrastra. Al principio solo fue un sentimiento de seguridad, era tranquilizador el hecho de tener a alguien a mi lado, después de tanto sufrimiento a causa del abandono de mi madre. Poco a poco el, lleno ese vacío con sus palabras de apoyo y sus cariños.
Mi vida no es color de rosa, un psicólogo es lo que mantiene medio estable.
Mi padre me recuerda a cada rato que por mi culpa ella se fue, me ha hecho tanto daño. Sin embargo aprendí a vivir con ello.
Gracias a mis amigos y a Jordan, pude conocer el lado bueno de la vida.
La vida es bella mientras la mires del lado positivo, hay que ser muy tonto o muy iluso para verla de ese lado. Ya que sin importar que tanto la mires, nunca encontrarás ese lado suyo, de ser bella claro está...
Pero si pude verlo, tal vez lo fui o lo soy, pero quiero seguir viéndolo así.
Acompáñame a vivir mi historia. Ríe, llora y divertirte con las ocurrencias de Elizabeth y Jordan.
La vida te envuelve en su manto de orgullo, te nubla y te hace decir cosas que no piensas.
Cometí un error al dejarte libre y ahora no se como repararlo, en gran parte fue mi culpa y lo tengo claro, pero también sé que sin ti no vivo y te quiero de regreso, buscare la forma de que olvidemos el pasado y volvamos a ceros o bien sigamos donde nos quedamos, pero te juro que lo lograré, volveré a enamorarte tanto o más que la primera vez.
Esa fue una parte de la carta que le escribí hace una semana y de la cual no he tenido respuesta, seguro no entienden nada, bueno aquí les va la historia que comenzó cuando teníamos unos 20 años. Una vida entera a su lado y todo se fue a la basura por errar las prioridades.
No tengo idea de cual sera nuestro futuro, solo sé que ahora.... Te Quiero Conmigo...