Cada vida es una historia; la mía es un relato de búsqueda constante, preguntas, caídas y gracia. ¿Qué significa ser cristiano en medio de esta generación? Es la pregunta de toda mi vida, algo que parece sencillo de responder, pero en realidad no tan fácil de entender en medio de una generación en donde seguir a Jesús esta entremezclado con individualismo, protagonismo, apariencia y realización. Esta es mi historia, la historia de alguien común que intenta día a día en medio de tanto ruido y voces entender, conocer y vivir el verdadero costo de seguir a Cristo. Aquí escribo todo desde el principio. No pretendo decir que soy la mejor escribiendo, pues sé que no; pero creo necesario hacer esto para recordar cuando mi memoria falle, la manera en la que he vivido estos cuantos suspiros aquí en la tierra. Escribo para recordar y agradecer y lo hago antes de que no pueda recordar nada o no pueda ya hacerlo. Nuestras vidas son un momento, las palabras quizá puedan ser parte de el legado de lo que Dios ha hecho. De hecho ya había comenzado antes a hacer esto, pero lo borré porque no fui sincera. Aquí ahora lo soy.