Inglaterra de los años setenta, Haytham se había enterado de las hijas de su media hermana Jennifer. Nada bueno podría venir de ese hombre, de ese templario. Los esfuerzos de Jenni para ocultar a sus hijas de el fueron en vano. Las había encontrado y ya era muy tarde para ellas, puesto que planeaba llevarlas a Boston para así casarlas con los templarios. Pero algo cambiará sus planes, puesto que Connor ahora sabe de la existencia de sus primas, Ginger, Prue y Faith.