|Segundo libro de la saga "Hijos de los Vengadores"| Las situaciones te hacen ser más fuerte, la vida te dará grandes golpes y caídas, pero es de poderosos levantarse y seguir. No había pasado más de una semana desde que el gran Steve Rogers despertó de su "sueño helado" cuando encontró fuera de su casa una pequeña canasta que en su interior había un diminuto e indefenso bebé, al tomar en brazos a aquella criatura, hubo una conexión especial entre ambos, y Steve no tuvo corazón para dejarla en un orfanato, así que decidió adoptarla bajo el nombre de Ava Rogers. Aunque Steve nunca pensó lo difícil que sería criar a una niña sin ayuda, y más cuando su presencia es requerida en el proyecto "Vengadores" para evitar el dominio mundial de un Dios demente y que con eso, se desencadenaron muchos problemas más. Pero como todo, hay peligros más allá de los mundos y de la galaxia, y por eso mismo, Ava tendrá que unirse a los demás hijos de los Vengadores para cumplir el cometido para los que ella, y los otros cuatro chicos, fueron enviados a la tierra.