Jungkook, quién a sus dieciséis años todavía no lograba comprender su apodo social, se encontraba fastidiado por ser llamado de tal manera.
Era bobo.
"¡Hola, chico fresa!"
Más molestaba escuchar ese apodo salir de los labios de ese pelirrojo. Era él quién más parecía una fresa...
Porque ¿Jungkook qué tenía en común con ese fruto? No era rojo, ni tenía cabello verde, o mucho menos era jugoso.
¿Entonces... qué era?
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