Un corazón roto es capaz de volver a amar ¿Es igual con una mente rota? ¿Dos asesinos son capaces de amarse entre sí? ¿Qué pasa cuando el peligro y la locura se encuentran? Amor, pasión, deseo, obsesión... sangre... muerte, lo único que podría llegar a unir a dos personas tan distintas, pero con la misma sed de sangre. Decir que la vida eterna es suficiente para ver el ciclo de la vida por completo ¿será cierto? ¿Qué tanto dura la eternidad cuando uno se pierde en la oscuridad? A veces es imposible determinar dónde está el punto que define el inicio de la locura, es como intentar armar un rompecabezas con muchas partes faltantes. Existen muchas formas de perder la razón, a veces a posta, a veces es sin darse cuenta, otras pocas veces es a causa de diferentes detonantes, factores comunes en la vida diaria, enojo, culpa, tristeza, incomprensión... amor... despecho... odio cualquiera de esos sentimientos por más minúsculos que sean si son la gota que derramó el vaso podría provocar un desastre del que no hay escape. Y no hay que negar que existen más sentimientos más motivos para seguir sanos, para seguir vivos. Así como la noche viene tras el atardecer la vida es acompañada de la muerte, pero no hay manera de adelantar la noche en cambio sí es posible acortar una vida.