Tras la propuesta fallida de William, hacia Elizabeth. Dicho caballero, regresa desilusionado y con el corazón roto a Chatsworth House, en donde apenas poner un pie en dicha residencia, la imagen de aquellos ojos marrones y vivaces lo atormentan, provocando que su carácter taciturno, arrogante e impulsivo incrementen, esto último lo lleva a aceptar finalmente los coqueteos de Caroline Bingley, quien aprovechándose de la situación, logra cumplir su tan anhelado deseo. Aunque este, esta por verse truncado ante la presencia inesperada de cierta joven.
Un encuentro inesperado y la llegada de un nuevo rival bastaran para alentar a William, para que luche por la mujer que tanto ama y que siempre amara. ¿Lograra su cometido?
Asher pensaba que tenía una vida perfecta. Era el mejor en su equipo de hockey, tenía las mejores notas en la universidad y un grupo de amigos que parecían serle fiel.
Pero cuando conoce a Skye, la hermana de uno de sus mejores amigos cree que la chica está loca. Tiene una actitud tan dura que es difícil de romper y suele irritarlo todo el tiempo desde que se ha mudado a vivir con su hermano y él.
Y cuando los chicos del equipo le proponen que no conseguiría conquistar a alguien como Skye, lo ve como un reto que está dispuesto a jugar, una apuesta para conquistar el corazón de alguien como Skye es suficiente para que Asher acepte, pues es demasiado competitivo y no está dispuesto a perder su puesto en el equipo de hockey y pasarse el resto del año en la banca como le han apostado.
Sin embargo, a medida que conoce a Skye, Asher se da cuenta que la chica es todo lo contrario a lo que le ha tratado de demostrar, conquistarla no parece tan complicado como pensaba y el corazón de ella no parece ser el único en juego.