Draco ve como los magos caen sin poder hacer algo más que ocultarse él y su hijo, el cual está inconsciente, a su lado un hombre de ojos verde con gafas redondas lo arrastra lejos de la masacre. Ya es suficiente. Ambos han visto el lado más oscuro de la magia y de los Muggles, tratando de que el tratado del secreto no se rompiera, que los magos siguieran ocultos que ningún niño mágico sufriera lo que Harry había sufrido. Todo hecho polvo por un error. Harry le guio entre los escombros de lo que había sido San Mungo, allí en una esfera, estaban sus hijos mellizos que le odiaban. Draco suspiro y dejó a Scorpius en la esfera. Ahora debían irse y arreglar todo. - Oye Potter, ¿qué te parece empezar una vida nueva?All Rights Reserved