Es él

Con el paso del tiempo, los sentimientos van cambiando. Ya no sientes lo mismo que sentías al principio.
Las mariposas se siguen sintiendo cuando lo ves, te alegra mucho saber de él, un mensaje que recibas de él te ilumina el rostro. Solo que ahora no sabes que es lo que realmente sientes.
Tienes miedo a perderlo, pero a la vez no quisieras sentir nada por él por temor a no ser correspondida.
Te sientes llena de emociones cuando piensas en él (alegría, coraje, cariño, miedo, enojo), te creas castillos en el aire, pero dentro de ti existe la realidad de saber que no está ni estará contigo, aun así, tu sigues estando con él.
Te sientes una más, pero buscas un pretexto para estar cerca de él, lo espías por una ventanita que casualmente da a su habitación.
Inconscientemente te imaginas estar con él, compartir momentos de tu vida a su lado, te quieres sentir protegida por él pero lo único que sientes cuando estás a su lado es debilidad, te sientes la mujer más débil ante su mirada, esa mirada en la que te pierdes y es difícil volverte a encontrar...