Emma a cumplido su sueño para trabajar con el Sr. Allwrong uno de los más grandes propietarios de San Diego. Pero nunca creyó que alguien como ella haría ese tipo de cosas. Mucho menos con su jefe.
Emma tiene muchas cosas en la cabeza. Tantas que, a pesar de haber algo raro en Storybrooke, tarda en detectarlo. Quizás por el estrés del trabajo, o por su incipiente y descontrolada magia... o porque Robin y Regina no dejan de pasear su maldito amor por la ciudad.
Pero pronto comenzará a ser imposible ignorar las señales y Emma tendrá que hacer frente a un nuevo misterio trabajando hombro con hombro con su alcaldesa.