Un día de clases, supuestamente común y corriente, en una prestigiosa academia nipona se hizo un gran estruendo, grandes tragedias empezaron a comenzar a partir de allí. Por ejemplo: más de cuarenta y cinco alumnos definitivos "secuestrados ", sus paraderos son desconocidos; alumnos masacrandose entre sí, como si se tratasen de animales salvajes, bañándose en sangre ajena.
En las ciudades la anarquía predominaba y sus habitantes se completaban como aquellos mismo estudiantes, como si alguna pandemia estuviera sucediendo. Pronto la situación salió del país oriental, Japón, y se extendió por todos los continentes haciendo que en cada uno de aquellos países se propagará aquella enfermedad llamada ❞DESESPERACIÓN❞.
Entre todas esas tragedias hechas por aquella pandemia mundial, un grupo de dieciséis alumnos definitivos, de esos tantos secuestrados, fueron llevados a un lugar supuestamente campestre de el país del sol naciente, en donde despertaron dentro de un santuario triple de un color rojo intenso. Este santuario se encontraba adornado por millones de telarañas, en su piso inicial, y la más resaltante era la que se encontraba cerca de la escalera para subir al primer piso. En aquella gran trampa de seda se resguardaba una hermosa mujer que les daría, a estos alumnos, su hermosa bienvenida a este juego de asesinatos mutuos.