- ¿Qué estás ocultándome, Brid? -pregunte con ojos suplicantes y un nudo formado en mi garganta. - Mis demonios, Adam. No quiero que veas mis demonios, lo siento-respondió con su voz quebrada y se fué. Debí haberla seguido pero no podía moverme, lo que dijo me hizo pensar... ¿Qué la hizo pensar que no la aceptaría con todos sus demonios cuando yo también tengo los míos?All Rights Reserved
1 part