Hermione vive en un pequeño pero hogareño pueblo de Londres. Con nueve años descubre una casa abandonada, muy sucia y desordenada, por lo que decide arreglarla haciendo de ella su pequeño rincón. El único problema es que a un kilómetro tiene una especie de "vecinos", por un año estos se van, pero el caso es que se fueron porque vendieron la casa. Lo que no sabe es que esos vecinos son los Weasley's, y le vendrán muchas aventuras con Luna. Y por supuesto, con Ron también.