Admito que fui una estúpida, admito mi error, admito lo que sea, pero esta culpa no me dejara.
¿Que culpa? Mate a mis padres inocentemente, sufro de doble personalidad, y pues por no toma mis medicamentos, por no hacer caso a mis padres, por ser una rebelde, ya no los tengo.
¿Como puedo conservar su presencia a mi lado? ¿Como puedo quitarme este dolor? ¿Como hacer que ellos se queden conmigo y me perdonen?
Bien, eso haré, llenaré su sangre en una botella vacía de esmalte, lo Guardare y nadie sabrá que es sangre de verdad, mis padres hay estan, desaparecer toda evidencia ahora es mi trabajo.
Matar y amar a quien me ame, llenar su sangre y quemar.
Esto es un esmalte Color de sangre
.
En un mundo donde la venganza y el rencor pueden consumirnos, hay historias que nos recuerdan que incluso en las circunstancias más oscuras, el amor puede florecer.