📍Portada provisoria. La original se encuentra en reformas.📍
"Todos estamos un poco rotos"
La tierra esta plagada de seres que deambulan libres entre los humanos.
Y la humanidad, egolatra desmedida, se regocija en la conjetura de la exclusividad, la fuerza, el poder y la avaricia, y eso no hará màs que llevarlos hacia su destrucción.
Cada especie se cree invencible a su manera.
Pero todo tiene su fin.
El amor salva, también destruye.
Todo depende de qué parte juegues.
Eso si, cuando un humano sufre desamor, sòlo puede tener un corazón roto, pero cuando un ángel caìdo tiene el corazón roto, sòlo se puede esperar lo peor.
¿Qué se puede obtener al corromper el alma de un ángel?
¿Acaso la muerte es el límite?
Sea lo que sea, las consecuencias muchas veces llegan en masa, sin importar si la inocencia reina, o el mal impera.
Y ahí es donde se encuentra el punto de quiebre, esperando la gota que derrame el vaso, la presión que haga perder el equilibrio, bastando en el desenlace de una lucha que se desatarà entre el bien y el mal, entre ángeles y demonios, entre Dios y el Diablo, entre el cielo y el infierno.
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Entre el cielo y el infierno: Ángel Impuro.
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Un adolescente de 17 años rencarna en el cuerpo de Suguro Geto en jujutsukaisen. Al menos no era un adolescente normal.
"en un mundo de bichos locos tengo que ganar poder domando a los bichos locos?... genial."
(Actualizaciones diarias y Disculpen las faltas ortográficas)