Nunca pensé que destacaría, siempre fui invisible. Pero ahora lo entiendo, entiendo porque nunca pude sentirme bien conmigo misma, entiendo las razones por las cuales he sido un bicho raro toda mi vida. Las entiendo y las acepto. Pero todo esto, es más grande, más grande que yo, más grande que cualquiera. Tengo razones para creer, creer en algo más. Nunca pensé que la chiflada de mi madre pudiera tener razón en cualquiera de sus locas historias sobre mi abuela, pero si, soy una Warren, nieta en sangre y mente de los Warren y ahora estoy preparada para enfrentarme a mi destino. Da igual lo que tenga que sufrir por ello, es quien era, quien soy y quien seré hasta que la muerte me lo arrebate.