Hielo, entre los dos sólo había hielo. Ya no había fuego en sus miradas, sus besos ya no sabían a nada, se había manchado el amor y no se habían dado cuenta, que la costumbre había entrado por la puerta. Tenían que afrontar la realidad, tenían que afrontar que su relación ya no daba para más, que había perdido dulzura, cariño y ternura, que sólo había hielo. Hielo... ¿podían ser valientes y acabar con esa farsa?Todos os Direitos Reservados
1 capítulo