La vida de Natalia González es de todo menos normal. No le gustan los videojuegos, no se le dan bien los deportes ni nada que tenga que ver con la coordinación y no es guapa. Le gusta cantar y estar en casa, además es cariñosa. Está loca, pero tiene personalidad, gracias a eso, consigue salir adelante a pesar de las dificultades. Sí, Natalia puede parecer rara, pero los que la conocen saben que no es así. Para ella sus amigos son lo que más quiere. Su lugar está donde estén ellos. Lo único que es seguro es que ella va a seguir su camino y nadie la va a cambiar.
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