Dio Brando ha sido condenado a vivir 100 años en un ataúd, en donde sus recuerdos se enfocan directamente desde su niñez por lo que ha comenzado escribir un diario, sin embargo una vez que su objetivo había culminado se da cuenta que algo falta en su vida. Una mujer que le pueda dar un hijo, un heredero de todo el poder que había logrado obtener a través del linaje Joestar.