Mi padre era el dueño de unas de las más importantes empresas de cartas en el mundo, quien lo diría las cartas si son un negoció. Pero ese no es caso, el caso es que yo su hijo herede su negocio o empresa. Me convertí en un magnate de la industria, pero como no ser un magnate, soy ingeniero, administrador, abogado y psicólogo. Si no fuera así sería el perfil perfecto para un psicópata asesino que odia a la sociedad, pues claro nunca dije que no lo fuera.
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