¿Hasta dónde es capaz un ser orgulloso para evitar enamorarse? ¿Y si no sabe que aquel sentimiento que lo carcome se trata de amor? ¿Entonces qué se puede esperar de Bruce?
Luego de ese encuentro no tan fortuito, el heredero más amargado de toda ciudad Gótica queda prendado de Clark, un joven soñador y crédulo que refleja unicornios en sus pupilas. Y cuando pensó que no había sido más que su imaginación, pronto se da cuenta que en su gélido corazón, el sentimiento más puro y confuso empieza a nacer, abriéndose paso entre malos entendidos, suspiros y tentaciones. Un camino que, quien jamás creyó enamorarse, ahora padecerá y aprenderá de la forma más complicada posible.
Donde el corredor argentino, conocido por su facilidad para chamuyar, cae ante una chica Ferrari
Donde Julieta, sin querer, cae ante el argentino chamuyero