Cuando el me tocaba me hacía sentir vivo, cuando el me besaba yo sentía el paraíso. Shawn, el me hizo perder la cabeza, lo amaba, pero sabía que era peligroso, estaba jugando con fuego y saldría quemado. No cualquiera se metía con un boxeador y salía con el corazón intacto. Aún así me jugaría la vida por el, por el monstruo que yacía dentro de ese hombre. Porque eso es lo que uno hace por amor, ¿no?