Kevin y Julianne eran mejores amigos, de pequeños solían jugar al escondite, meses más tarde Kevin se dio en la cabeza jugando al mismo juego que jugaba con Julianne y Kevin ya no recordaba quien era Julianne, le diagnosticaron perdida de memoria, Kevin rompió el corazón a todos, pero el corazón que nunca paro de llorar fue el de Julianne, un año después, los padres de Kevin no tenían otra opción que irse a otro lugar...Julianne al oír que su mejor amigo se iba, decidió hacerle recordar el parque en el que solían jugar