- Sans, ¿y si llega mi madre?- dijo insegura la chica. - No te preocupes princesa- el esqueleto rió- Nada de lo que pase llegará a las "cuencas" u oídos de tu familia..- su acercamiento a ella la hizo retroceder por inercia, lo que hizo que le dió gracia al esqueleto. - Solo recuerda, a partir de ahora...- susurró en su oído. «Eres mía» ~~~ Historia dedicada a @Shi_Jehoahaz_Abraham Historia 100% mía.