Harriet jamás pensó encontrar a su amor verdadero, pero lo hizo y todo fue color rosa hasta el día en que se lo arrebataron de las manos, ella juro que nunca más se volvería a enamorar.
-Porque me miras de esa manera?- Dije
-No lo sé, tal vez porque tienes la sonrisa más linda
-A veces tengo miedo
-Quieres que deje de hacerlo?
-No, le temo al día en que no estemos juntos
-No tienes por qué temer. Yo siempre estaré en tu corazón como tú lo estas en el mío.
-Me lo prometes?
-Te lo prometo.
El tomo mi mano como si fuera demasiado delicada y tuviera miedo de romperla, luego se acercó más y me dijo.
-Te amo.- Luego me beso, al despegar sus labios de los míos desperté y el dolor regreso a mi corazón.