Llene de aire mis pulmones, tratando de tomar el valor que aun me faltaba-tienes que hacerlo, es por salud, por tu propio bien- me repetía - tu puedes- seguía animándome internamente. Cuando puse mi primer pie dentro del Gym, cuando por fin me atreví, un olor a sudor invadió mi nariz, observe a mi al rededor en busca del encargado, y en mi intento de buscarlo, eche a un vistazo las personas que estaban adentro, todos con buenos cuerpos, chicas delgadas con un abdomen y piernas de infarto, chicos fornidos, con unos traseros que incitaba a tocarlos y unas piernas envidiables. Mi vista se detuvo en un chico en especifico, me tome el atrevimiento de observarlo por un momento, su piel era tan blanca, y tenia un cuerpo que ¡ oh Dios Santo! ahí yo si peco. Y luego caí en la realidad, mi realidad, todos con buenos cuerpos, nadie como yo, eso me convertía ahora en adelante en: " La Gorda Del Gym"