A Flug nunca le ha gustado no saber. Desde pequeño es curioso de todo lo que se encuentra a su alrededor, preguntando constantemente el porqué y el cómo de cada pequeña cosa, llegando incluso a fastidiar a los adultos que interrogaba insistentemente. Cuando tuvo la inteligencia suficiente para leer, dejó de preguntar. A Flug nunca le ha gustado sentirse excluido. Tal vez se deba a la poca socialización que sufría desde muy joven debido a su alto intelecto, evidentemente superior al del resto de sus compañeros, quiénes intimidados lo dejaban a un lado. Con el pasar de los años dejó esos pobres intentos de amistad y se acostumbró a la soledad. A Flug nunca le ha gustado olvidar. Le parecía incoherente, memorizar las cosas para luego dejarlas a un lado en el viejo baúl de pensamientos. Todo debía tener alguna utilidad, por mínima que esta sea. Pero olvidar es tan inevitable como respirar. Entonces, ¿por qué sentía que todo aquello pasaba? (La imagen del fanfic pertenece a: redmoondragon-art)