Como todo en la vida, nada es para siempre, ni el amor ni el dolor pero para evitar el enamoramiento o el sufrimiento hay que aprender que hay límites.
Era lo que Mackenzie Anderson había aprendido por tanto tiempo pero ¿Que sucede? Llegó Él chico. Ese chico que era tan misterioso, tan enigmático, como si todo su cuerpo fuese un imán para Mackenzie, todos pensaban lo peor de él pero Mack no se dejaba llevar por los prejuicios que revoloteaban por la escuela, asi que ella tomo una decisión, una decisión tan facil pero que no sabia a que terrenos la llevaría. Decidió arriesgarse a conocer a Chase Morgan aun en contra de todos.