La vida de Danielle es patética al 100% y solo escaparse en la noche de los mismos días aburridos, de las mismos religiosos en su casa los fines de semana, fue su única salida. ¿Pero que si un día todo cambia de puras fiestas y amigos a pistolas y secuestro?
Porque Danielle nunca se dejo engañar en su vida con que las chicas que van a la iglesia son las santas, porque ¿esas? Son las peores. O como prefiere decirles Danielle "Good Girls are Bad Girls"
Y ella era una de esas.