La vida es una completa mierda; esa fue la conclusión a la que llegue con solo tener ocho años. Los seres humanos tienden a prejuzgarte incluso antes de conocerte, pero para mí, eso sucedió incluso antes de que yo naciera.
Prácticamente me desconozco, parece ser que los demás saben más de mí que yo mismo. Sin padres, familiares o algún recuerdo relacionado a ellos; sin saber alguna pizca de mi pasado, solo siendo una víctima de los problemas que crearon mis predecesores.
Es tan estúpido como marcar al hijo de Hitler como Nazi incluso antes de que este tenga conciencia propia; ese tipo de pensamientos, nos convierte en la mierda que dicen que somos, ¿acaso nos dejan opción de elegir?
Vivo en un orfanato desde que tengo uso de razón; lo más cercano a una familia eran las madres encargadas de dicho orfanato, lo más cercano a sentir amor o felicidad fue un abrazo proporcionado por mi cuidadora... Fué el abrazo más doloroso e hipócrita que he sentido en toda mi vida.
Dicho abrazo sucedió poco después de haber despertado mi poder; cómo todo niño, me emocioné por ello; pensé que sería motivo de alabación... Pero para mí desgracia, solo fue el detonante para que mi vida se fuera a la basura.
Pocos días después de haber despertado mi poder, me tomaron como sujeto de prueba en diferentes experimentos de laboratorio; lugar el cual fue creado especialmente para mí. El hijo del mayor asesino que ha existido en la faz de la tierra
Saliendo a flote toda la información sobre mi padre, último líder de un grupo llamado "The elementals", los cuales fueron encargados de matar a millones de personas, eliminando tanto a héroes como a villanos por igual.
Debido a eso todo el mundo les sentían miedo y rencor. Y para mí desgracia, me tocaba soportar las consecuencias de sus acciones...
Nt: No diré más porque no cabe en la sinopsis, Wattpad tiene un límite de 2k de letras; en los capítulos está mejor explicado del que tratará.
Donde el corredor argentino, conocido por su facilidad para chamuyar, cae ante una chica Ferrari
Donde Julieta, sin querer, cae ante el argentino chamuyero