Mi vida era perfecta.
Cumplí mis sueños, me case, logre incursionarme mas en mi carrera, deje de ser "el niño de coco" para por fin ser reconocido por mi nombre ¿todo marchaba bien no? Al parecer no, las envidias son un claro ejemplo de que nunca estarás tranquilo y menos en el medio artístico. El estar en este medio es estar expuesto a mil ojos que esperan cualquier movimiento para atacarte para hundirte es bastante difícil, pero tenía buenas recompensas. Dinero, lujos, amor, miles de personas aclamando tu nombre ¿era una buena inversión? Por supuesto que sí. Pero ¿Qué pasa cuando todo "marcha tan bien" que dejas de ser tu mismo? Bueno pregúntenmelo a mí, mi familia decía que la fama me había comido el cerebro; que aquel niño humilde había desaparecido que el dinero, el poder, y los lujos me habían llevado a la perdición y bueno mi familia no era la única que pensaba eso. Miles de mis seguidores me habían dejado de seguir por dejar de "ser yo mismo" por "dejar de amarles" Poco a poco fui perdiéndolo todo y quedándome completamente solo. Sin esposa, sin hijos, sin fans. Pero todo tenía un porque además de mi abandono y soledad, muchas personas tenían la culpa de lo que hice y si tu estas leyendo esto pues bienvenido... eres uno de ellos.
Soy Luis Ángel Gómez Jaramillo y me suicide a la edad de 20 años ¿por qué? Estas apunto de saberlo