Este es el relato de un chico llamado Leonard, de una estatura promedio, bueno para el estudio y el trabajo, malo para el amor.
Un chico de unos aproximadamente 22 años, estudiante de Psicología, y de noche trabaja como mesero en un restaurante de su ciudad, por su trabajo le toca lidiar con clientes de todo tipo, desde hombres que fingen un matrimonio feliz para ocultar su más oscura verdad, hasta niñas de escasos 16 años que ya han recorrido más que una mujer de 30, cierta noche antes de tomar su turno se tropieza con una mujer de unos aproximados 36 años, tan hermosa que podría fácilmente decir que tiene 26.