Las emociones son demasiado frágiles, y los vínculos son muy fáciles de romper.
Las carreras de coches son ilegales en Londres, lo cual significa que, obviamente, son celebradas igualmente. Eternal, un pequeño equipo formado por Dylan, un mecánico que solo quiere olvidar su pasado; Federica, una preocupada manager que solo quiere lo mejor para su familia; y Logan, un piloto que hará lo que haga falta para proteger a sus amigos, darían lo que fuera para ganar el último Gran Premio.
No obstante, la policía de Londres también hará lo que sea necesario para acabar con las carreras. Las dos caras de esta guerra chocan cuando Jules, un agente encubierto de la policía, sea enviado para investigar y acabar con las carreras. Jules sabe que está hecho para ese trabajo, pero unos inesperados vínculos con los miembros de Eternal terminarán conduciendo a traiciones.
Entonces, se da cuenta de que puede que sea más difícil de lo que parece.
En la cima de la montaña, el aire es más frío y el silencio más ensordecedor. No es solo la nieve la que cae en el descenso, también lo hacen las certezas y los miedos. En el mundo del snowboard, cada salto es un riesgo y cada curva puede cambiarlo todo.
Sue Harper ha pasado su vida deslizándose entre expectativas y sueños, buscando algo más que aplausos: la certeza de que su lugar en la cima le pertenece. Pero cuando la línea entre la ambición y los sentimientos se vuelve borrosa, el verdadero desafío no está en la pista, sino en mantener el control cuando el corazón quiere lo contrario.
En un espacio donde la lealtad, la rivalidad y la libertad chocan como avalanchas, aprender a confiar puede ser más peligroso que cualquier caída. Porque el hielo guarda secretos, y a veces, lo más difícil no es llegar arriba... sino no perderse en el camino.