Después de una guerra que parecía no tener fin, la nación de Uneris firmó la paz con sus enemigas, las brujas del sol y la luna. Tras el arreglo de fronteras y territorios, la ciudad de Ardid fue designada capital neutral y se convirtió rápidamente en la cuna del progreso y la política. Veinte años más tarde, en vísperas del Día del Entendimiento, una serie de ataques a los Grandes Clanes avivan la enemistad latente entre ambos bandos. Sarai de Torre Quemada pisa por primera vez la ciudad como una inquisidora novata y, junto a su compañero, comienza a seguirle la pista a un inquisidor desaparecido. Por otro lado, Nyssara Umbra se afana en encontrar a quien se atrevió a atacar a su matriarca para hacérselo pagar. Leyendas vivientes despiertan de su letargo mientras los engranajes comienzan a moverse en una tierra dividida. Obra registrada con todos los derechos reservados. Cualquier intento de plagio tendrá consecuencias legales.