LIFE

La vida no es fácil, ni sencilla. Cada persona en este mundo ha sufrido, en mayor o menor medida, y ha reaccionado según las herramientas que adquirió. Pero eso no debe detenernos de buscar otros caminos por recorrer, otros seres que conocer, otras actitudes por implementar. Tenemos el control para cambiar cualquier cosa. Se necesita valor y voluntad, ganas de seguir y realmente vivir, o por el otro lado de no morir.
En la mayoría de los casos lo que nos incentiva a descubrir, tomar nuevos rumbos, cambiar, desconstruirse y construirse es la muerte. La vida no es infinita, no somos seres inmortales. Por el contrario, nuestros minutos están contados. Pero nosotros somos quienes decidimos como aprovecharlo, en que gastarlo y con quien. Podemos equivocarnos y no será tiempo desperdiciado, ya que en consecuencia habremos aprendido. Habremos experimentado. Vivido.
Cada momento es una enseñanza que podremos tomarla y hacerla nuestra, para que en algún futuro no nos equivoquemos de nuevo.
Es inevitable, el pasado nos define, nos etiqueta. Por el otro lado, el presente nos permite cambiar esa perspectiva, ese prejuicio. Si realmente lo anhelamos, lo lograremos. Será duro pero no imposible. Y eso hay que tener en mente cada vez que queramos rendirnos o tirarlo todo por la borda.